14/08/2008 
                                      Ambito Financiero - Nota - Economía 
                                      - Pág.8
                                      Julio Alak, representante estatal en Aerolineas, 
                                      intentó defender con poco exito la 
                                      estatización
                                      AA: prometen rentabilidad 
                                      en seis meses
                                    Julio Alak, gerente general 
                                      de Aerolíneas Argentinas por el Estado, 
                                      cerró ayer la ronda de explicaciones 
                                      en Diputados sobre el proyecto de reestatización 
                                      de Aerolíneas Argentinas y Austral. 
                                      En su informe, el último de una serie 
                                      en donde los diputados escucharon a sindicalistas, 
                                      a la Auditoría General y al Grupo 
                                      Marsans, Alak criticó «la indiscutible 
                                      falta de inversión» y el «abultado 
                                      déficit» en que quedó 
                                      tras la gestión de los españoles.
                                    «El 30 de mayo pasado, 
                                      la deuda de Aerolíneas alcanzaba 
                                      la suma de 2.672 millones de pesos, con 
                                      un elevado déficit operativo mensual 
                                      que se viene acumulando desde enero de este 
                                      año», dijo y aunque intentó 
                                      explicar que Marsans poco había hecho 
                                      para «mantener la flota de aviones», 
                                      prometió que «en los próximos 
                                      seis meses, con la gestión del Estado, 
                                      se podrá garantizar el servicio».
                                    «En seis meses se 
                                      podrá conseguir un aumento de la 
                                      rentabilidad de la empresa; en principio 
                                      porque pensamos llegar a fin de año 
                                      con 50 aviones operando, casi el doble de 
                                      los 26 con que recibimos la empresa cuando 
                                      nos hicimos cargo», abundó.
                                    Mientras la oposición 
                                      le cuestionaba el proceso en el que el Estado 
                                      terminaría asumiendo la deuda de 
                                      las dos empresas, Alak prefirió explicar 
                                      el plan de emergencia para recuperar las 
                                      compañías como la «reestructuración 
                                      de plazos y tasas de interés de créditos 
                                      caros con diferentes bancas, en las que 
                                      se pagaban tasas de hasta 21%».
                                    También explicó 
                                      que se dio de «baja el contrato de 
                                      leasing de nueve aviones, que se encuentran 
                                      desde hace años en estado de desguace 
                                      y que insumían un gasto anual de 
                                      11 millones por unidad».
                                    En ese plan de emergencia 
                                      que ya se está ejecutando incluyó: 
                                      «Dimos de baja el alquiler de una 
                                      oficina en Londres, donde la empresa no 
                                      opera desde hace dos años, y renegociamos 
                                      con las compañías petroleras 
                                      el precio del combustible; se dejaron de 
                                      pagar u$s 450 mil mensuales en gastos de 
                                      publicidad y se suprimieron gastos en pasajes 
                                      de cortesía», dijo y hasta 
                                      alardeó: «Gracias a las medidas 
                                      que se empezaron a tomar, el último 
                                      fin de semana la puntualidad de Aerolíneas 
                                      y Austral alcanzó el 82%».
                                    Pero ninguno de sus argumentos 
                                      convencieron a la oposición, que 
                                      se niega a convalidar una transferencia 
                                      de la empresa a manos estatales con un pasivo 
                                      de u$s 890 millones y que denuncia el vaciamiento 
                                      de Aerolíneas Argentinas y la falta 
                                      de control de Ricardo Jaime en los últimos 
                                      años.
                                    
                                      Oposición
                                    Así, cuando el representante 
                                      del Estado en la empresa terminó 
                                      su informe, la Coalición Cívica, 
                                      la UCR, el PRO y el justicialismo disidente 
                                      anunciaron que no apoyarán el proyecto 
                                      oficial y que a partir de hoy comenzarán 
                                      a elaborar una estrategia común -como 
                                      hicieron con el debate de la Resolución 
                                      125 sobre retenciones móviles- para 
                                      llevar al recinto el día que el kirchnerismo 
                                      pretenda debatir la estatización.
                                    Uno de los cruces más 
                                      duros con Alak en la reunión de ayer 
                                      de las comisiones en Diputados tuvo lugar 
                                      con el macrista Esteban Bullrich: «Sin 
                                      evasivas, explique de dónde saldrá 
                                      el dinero para cancelar los pasivos que 
                                      tiene Aerolíneas Argentinas. ¿De 
                                      dónde, de qué bolsillo saldrán 
                                      esos fondos?», le preguntó.
                                    Sólo obtuvo como 
                                      respuesta una defensa del plan oficial de 
                                      transferencia de las acciones de las dos 
                                      líneas aéreas.
                                    El radicalismo ya presentó 
                                      el martes pasado un proyecto alternativo 
                                      al oficial que comprende la creación 
                                      de una nueva empresa asimilando rutas, empleados 
                                      y expropiando activos e instruyendo a la 
                                      Procuración del Tesoro para que avance 
                                      con el trámite de quiebra de la vieja 
                                      Aerolíneas, para rechazar así 
                                      que el Estado asuma la deuda de u$s 890 
                                      millones.
                                    Ahora, la Coalición 
                                      Cívica, el PRO y la UCR comenzarán 
                                      a unificar criterios para llegar al recinto 
                                      de Diputados con una propuesta común. 
                                      En la misma línea que el proyecto 
                                      radical original, el nuevo texto planteará 
                                      que el grupo Marsans se haga cargo del pasivo 
                                      de Aerolíneas y que se cree una nueva 
                                      empresa aérea del Estado.