19/11/2008 02:26 
                                      La Prensa - Nota - Política 
                                      - Pág.4 
                                      Un encuentro muy 
                                      similar a una comedia 
                                     
                                      La reunión por Aerolíneas 
                                      Argentinas de la Comisión Bicameral 
                                      de Seguimiento de las Privatizaciones tuvo 
                                      un paso de comedia. El presidente de la 
                                      empresa, Horacio Fargossi, se negó 
                                      a opinar sobre la evaluación de la 
                                      aerolinea por parte del Tribunal de Tasaciones, 
                                      alegando que él no estaba autorizado 
                                      a negociar y se retiró dejando el 
                                      rechazo por escrito sin avisarles a los 
                                      legisladores que sólo se dieron cuenta 
                                      después de haber declarado el cuarto 
                                      intermedio. 
                                       
                                      Pero no fue eso lo único insólito 
                                      que ocurrió. Personal de seguridad 
                                      intentó impedir el acceso de los 
                                      periodistas a las deliberaciones de los 
                                      legisladores alegando razones de "higiene 
                                      y seguridad". 
                                       
                                      La justificación de esa inédita 
                                      restricción fue que el encuentro 
                                      se realizaba en un salón con capacidad 
                                      máxima reducida. Los integrantes 
                                      de la comisión son 12 y, si a ellos 
                                      se suman los asesores y taquígrafos, 
                                      casi nadie más podía ingresar 
                                      al lugar donde se decidía el paso 
                                      al Estado argentino de un pasivo de 800 
                                      millones de dólares y de 9 mil empleados. 
                                       
                                      Cuando los cronistas parlamentarios argumentaron 
                                      que por el reglamento de la Cámara 
                                      las reuniones son públicas, fueron 
                                      remitidos a la secretaria de la Bicameral 
                                      para que los habilitara  
                                      
                                      
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