22/11/2008 05:10
                                      La Nación - Nota - Economía 
                                      & Negocios - Pág.1
                                      La Justicia limitó 
                                      aún más al grupo Marsans en 
                                      Aerolíneas
                                      >Designó un veedor para que haga 
                                      un informe sobre la empresa y ratificó 
                                      al representante estatal
                                    Por Diego Cabot
                                      LA NACION
                                    Ayer se le sumó otro capítulo 
                                      a la tortuosa novela sobre la reestatización 
                                      de Aerolíneas Argentinas y Austral. 
                                      Por pedido del Gobierno, el juez Esteban 
                                      Furnari designó un veedor para que 
                                      elabore, en 30 días, un primer informe 
                                      sobre el estado de las dos empresas aéreas.
                                    Además, la Justicia hizo lugar a 
                                      una medida cautelar para que se mantenga 
                                      el actual esquema de conducción (continuidad 
                                      del grupo español Marsans, con la 
                                      presencia de un gerente general representante 
                                      del Estado, Julio Alak).
                                    La medida fue notificada por el secretario 
                                      de Transporte, Ricardo Jaime, que pasadas 
                                      las 14 de ayer llegó a las oficinas 
                                      de la compañía, en Bouchard 
                                      y Lavalle, con la resolución en la 
                                      mano y la intención de mostrar a 
                                      quien lo quisiera ver, la firmeza del Estado 
                                      en su objetivo de quedarse con ambas empresas 
                                      aéreas.
                                    Además de designar un veedor, el 
                                      contador José Luis Perrone, el fallo 
                                      intenta darle un marco de estabilidad a 
                                      la conducción de Aerolíneas. 
                                      Sucede que Alak había asumido el 
                                      cargo en el marco del acta acuerdo firmada 
                                      entre el Gobierno y Marsans el 17 de julio 
                                      pasado. Allí se estableció 
                                      el procedimiento de compra de las dos compañías 
                                      y se acordó la formación de 
                                      un comité de gestión ?integrado 
                                      por representantes de ambas partes? que 
                                      conduciría las aerolíneas 
                                      hasta que se terminara el proceso de venta.
                                    Por consenso se nombró a Alak, pero 
                                      ese acta acuerdo nunca se cumplió, 
                                      los plazos se vencieron, y Aerolíneas 
                                      y Austral siguieron siendo manejadas por 
                                      el ex intendente de La Plata. Las diferencias 
                                      entre el Gobierno y Marsans se profundizaron 
                                      entonces. Los españoles, que siguen 
                                      siendo los dueños de la mayoría 
                                      accionaria, nombraron subgerente a Jorge 
                                      Molina. De esta manera, buscaban poner un 
                                      cerco a la gestión estatal dentro 
                                      de las empresas que aún les pertenecen.
                                    En una improvisada conferencia de prensa 
                                      en el hall del edificio, Jaime dijo al periodismo 
                                      que la medida fue decidida "ante la 
                                      situación planteada el martes último, 
                                      cuando [en asamblea de accionistas] se pretendió 
                                      quitar toda facultad al actual gerente general 
                                      al nombrar un adjunto [Molina] con igualdad 
                                      de facultades, algo así como una 
                                      administración paralela, que podría 
                                      afectar la operatividad de las compañías".
                                    La medida cautelar se dispuso en un juicio 
                                      en el que el Estado solicita a la Justicia 
                                      que se le compute el dinero que ha desembolsado 
                                      desde julio pasado ?770 millones de pesos, 
                                      según informó el subsecretario 
                                      Legal, Rafael Llorens? como capitalización. 
                                      "En una asamblea se impidió 
                                      al Estado capitalizar los montos que ha 
                                      venido desembolsando en la sociedad. Esto 
                                      es una medida cautelar antes del proceso 
                                      judicial", dijo Jaime, que además 
                                      anticipó que en los próximos 
                                      días presentarán la demanda. 
                                      "La empresa ?agregó? está 
                                      en estado de disolución y el Estado 
                                      propuso capitalizarla para evitarlo".
                                    La medida causó la inmediata reacción 
                                      en el grupo Marsans. Vicente Muñoz, 
                                      director Financiero del grupo, dijo a La 
                                      Nacion que el grupo concurrirá al 
                                      Tribunal Arbitral del Banco Mundial (Ciadi, 
                                      según sus siglas en inglés). 
                                      "Iniciaremos los pasos para ir al Ciadi. 
                                      No entendemos lo que pasa en la Argentina", 
                                      sostuvo.
                                    Luego agregó que el Estado toma 
                                      decisiones como si la compañía 
                                      ya le perteneciera.
                                    "En estos momentos ?acusó? 
                                      la presidenta Cristina Kirchner tomó 
                                      un avión de la compañía 
                                      para ir a la reunión del G-20 y luego 
                                      para seguir con su gira por Africa sin considerar 
                                      a los pasajeros que tenían que volar 
                                      a Australia. No entendemos qué quieren. 
                                      Esto es un expolio, una confiscación. 
                                      Quieren llevarse la compañía 
                                      sin pagarnos nada y vamos a defender nuestros 
                                      intereses."
                                    Molina, por su pare, también mostró 
                                      su sorpresa con la medida. "Esto es 
                                      una expropiación de hecho", 
                                      dijo en diálogo con La Nacion.
                                    Por su parte, según un cable de 
                                      la agencia DPA, el gobierno español, 
                                      que dirige José Luis Rodríguez 
                                      Zapatero, confía en que pueda llegarse 
                                      a una "solución negociada" 
                                      en el conflicto de Aerolíneas Argentinas, 
                                      según manifestaron ayer fuentes oficiales 
                                      a medios españoles. Según 
                                      uno de los voceros del opositor Partido 
                                      Popular, Gustavo de Arístegui, la 
                                      medida fue catalogada como "intervencionismo" 
                                      del gobierno argentino con motivación 
                                      "populista" para hacer frente 
                                      a problemas de "imagen".
                                    
                                    
                                    