11/11/2008 03:36
                                      La Nación - Nota - Economía 
                                      & Negocios - Pág.6
                                      Marsans dice que 
                                      si no vende Aerolíneas, le inyectará 
                                      capital
                                      
                                      >Lo planteará mañana 
                                      en una asamblea
                                    El grupo español Marsans dijo ayer 
                                      que estudiaba la posibilidad de capitalizar 
                                      Aerolíneas Argentinas en caso de 
                                      que la empresa, cuyo último balance 
                                      anual registró un patrimonio neto 
                                      negativo de $ 81 millones, no se venda al 
                                      Estado.
                                    Marsans tiene el 94,6% del control de la 
                                      compañía, por lo que deberá 
                                      aportar la proporción correspondiente 
                                      de esos 81 millones si no quiere perder 
                                      participación. "Capitalizamos 
                                      porque vamos a vender la empresa, no a regalarla", 
                                      dijo Jorge Molina, miembro del directorio 
                                      de la firma.
                                    La situación patrimonial será 
                                      uno de los puntos que se abordarán 
                                      mañana durante la asamblea de accionistas 
                                      de Aerolíneas, la continuación 
                                      de un encuentro celebrado hace un mes, cuando 
                                      se aprobaron los estados contables de 2007. 
                                      "Vicente Muñoz [director corporativo 
                                      de Marsans] va a traer el miércoles 
                                      el mandato de los accionistas, que creo 
                                      que seguramente va a ser lo que ya se dijo 
                                      en la última reunión de directores, 
                                      en la que se habló de la capitalización 
                                      si es que no se llegaba a la venta", 
                                      dijo Molina a la agencia de noticias EFE.
                                    "Obviamente", contestó 
                                      el directivo cuando se le preguntó 
                                      si la empresa era capaz de hacerlo. "Tiene 
                                      solvencia económica para seguir adelante 
                                      con esta compañía y para capitalizarla."
                                    La situación será tratada 
                                      también hoy por la tarde, cuando 
                                      el secretario de Transporte, Ricardo Jaime, 
                                      se reúna, en el anexo de la Cámara 
                                      de Diputados, con miembros de la Comisión 
                                      Bicameral de Reforma del Estado y Seguimiento 
                                      de las Privatizaciones.
                                    En tanto, el fiscal Federico Delgado le 
                                      pidió ayer al juez Daniel Rafecas 
                                      que indagara a los miembros del directorio 
                                      de Interinvest, sociedad creada por Marsans 
                                      para controlar Aerolíneas, por supuesto 
                                      fraude por sobreventa de boletos. En un 
                                      escrito elevado al juez, el fiscal dijo 
                                      que sus investigaciones habían permitido 
                                      determinar que durante el primer semestre 
                                      del año Aerolíneas y Austral 
                                      habían vendido "numerosos pasajes 
                                      sabiendo perfectamente que, con la infraestructura 
                                      operativa disponible, jamás podrían 
                                      cumplir los compromisos asumidos". 
                                      Según Delgado, esta supuesta maniobra 
                                      les permitió a las empresas recaudar 
                                      "anticipadamente las ganancias respectivas" 
                                      de la venta de esos boletos.
                                    Una vieja pretensión
                                      El control de Aerolíneas es un viejo 
                                      anhelo del Gobierno, que firmó el 
                                      17 de julio pasado un acta para negociar 
                                      la compraventa de Aerolíneas, sin 
                                      que hasta el momento hayan llegado a un 
                                      acuerdo.
                                    Eduardo Aranda, uno de los representantes 
                                      de Marsans en el comité que administra 
                                      la aerolínea, no descartó 
                                      que, en la reunión de mañana, 
                                      el Estado argentino planteara la manera 
                                      en que deberían contabilizarse los 
                                      fondos aportados por el Gobierno para las 
                                      operaciones: si como un préstamo, 
                                      un aporte solidario o un aporte al capital 
                                      de la empresa. "En este último 
                                      caso, eso debe ser aceptado por el accionista 
                                      mayoritario y valorarlo. ¿Cómo 
                                      se valora? ¿A valor nominal, con 
                                      una prima o, como ellos dicen que esto vale 
                                      cero, a otro valor?", se preguntó 
                                      Aranda en comunicación con EFE.
                                    Ambas partes han presentado sus valuaciones 
                                      sobre el precio de la empresa: para el Estado 
                                      tiene una valoración negativa de 
                                      US$ 832 millones, por lo que no debería 
                                      pagar nada por la compra; para Marsans, 
                                      vale entre 330/546 millones.
                                    "Estamos hablando de unas diferencias 
                                      tan bestiales que no es cuestión 
                                      de afinar el lápiz, sino de pasar 
                                      a un tercer evaluador y se acabó", 
                                      dijo Aranda. Molina consideró que 
                                      si el Gobierno pretendiera imponer un precio 
                                      que no es aceptado por Marsans, sería 
                                      una "expropiación encubierta". 
                                      Aranda reiteró que, en caso de expropiación, 
                                      el grupo español recurrirá 
                                      a la defensa legal por "todos los medios 
                                      posibles; no van a permitir que les quiten 
                                      una compañía sin el derecho 
                                      al pataleo".