15/10/2008 05:46
                                      La Razón - Matutina - Nota 
                                      - Actualidad - Pág.10
                                      Tras una tensa reunión, 
                                      no hubo acuerdo por el precio de Aerolíneas
                                    Marsans aprobó, con la oposición 
                                      del Gobierno, un balance deficitario. A 
                                      la noche, Jaime tuvo un duro cruce con directivos.
                                    JUAN JOSE TRAVERSO
                                    
                                      Creció la tensión entre el 
                                      gobierno y el Grupo Marsans. Ayer, luego 
                                      de dos reuniones, no se llegó a un 
                                      acuerdo sobre el precio de Aerolíneas 
                                      Argentinas y Austral y se pasó a 
                                      un cuarto intermedio hasta el 12 de noviembre. 
                                      Además, se extendió hasta 
                                      esa fecha el Acta Acuerdo para la negociación 
                                      de la venta, que vencía ayer.
                                    Según fuentes del Ejecutivo, el 
                                      secretario de Transporte, Ricardo Jaime, 
                                      mantuvo un ríspido encuentro con 
                                      los directivos del grupo español 
                                      a última hora de la noche, sin que 
                                      lograran ponerse de acuerdo en los términos 
                                      de la negociación.
                                    A la tarde, en un encuentro realizado en 
                                      el Ministerio de Planificación, los 
                                      representantes de Interinvest, el socio 
                                      mayoritario controlado por el grupo español 
                                      Marsans (95%), habían aprobado el 
                                      balance 2007, que arrojó una pérdida 
                                      de u$s 25 millones, como así también 
                                      la gestión de la compañía 
                                      realizada por el Directorio vigente a esa 
                                      fecha.
                                    Por su parte, los accionistas minoritarios 
                                      que representan al Estado argentino (5%), 
                                      y a los trabajadores a través de 
                                      un Programa de Propiedad Participada (1%), 
                                      lo habían rechazado.
                                    
                                      MILLONARIA DIFERENCIA
                                      Pero la mayor divergencia es en torno al 
                                      valor de la firma. Mientras que para el 
                                      banco Credit Suisse, contratado por Marsans, 
                                      la valuación de Aerolíneas 
                                      y Austral oscila en una banda que va de 
                                      los u$s 250 a los 450 millones, según 
                                      flujo estimado de fondos, desde la cartera 
                                      de Transporte se indicó que la valuación 
                                      encargada al Tribunal de Tasaciones de la 
                                      Nación habría arrojado un 
                                      valor negativo del orden de los u$s 600 
                                      millones. Es decir, una diferencia de u$s 
                                      1.000 millones.
                                    Según el acta acuerdo firmada entre 
                                      el Gobierno y Marsans prorrogada ayer, si 
                                      no hay coincidencia en los montos un tercero 
                                      elegido por ambos debe realizar otra valuación. 
                                      Sin embargo, el Congreso aprobó el 
                                      mes pasado una ley por la cual la valuación 
                                      final deberá ser aceptada o rechazada 
                                      por ese cuerpo.
                                    Para la oposición, todo esto es 
                                      de una gran precariedad jurídica 
                                      y la expropiación es el único 
                                      camino que queda.